En América Latina y el Caribe el 32,1% de la población total vive en situación de pobreza y 13,1% en pobreza extrema (datos de CEPAL, 2022).
En el Día Internacional por la Erradicación de la Pobreza, desde la Federación Internacional de Planificación Familiar (IPPF) recordamos a todas las organizaciones internacionales, nacionales y a los Estados, la urgencia en avanzar con programas que coloquen como prioridad a las mujeres, niñas y mujeres trans en l centro de las respuestas para erradicación de la pobreza.
Desde 1987, el 17 de octubre nos permite reflexionar sobre los progresos internacionales en materia de erradicación de la pobreza en el mundo, la cual es una necesidad imperativa: la pobreza constituye una violación a los derechos humanos de todas las personas y es grave que lo siga existiendo, pues ya tenemos todos las tecnologías y conocimientos para erradicarla. No obstante, su eliminación requiere respuestas con perspectiva de género: en América Latina y el Caribe las mujeres tienen un 30% menos de probabilidades que los hombres de tener acceso a un empleo y una mayor probabilidad de vivir en situación de pobreza y llegar a la vejez sin una pensión digna.
En ese sentido, hoy es un día para igualmente recordar que garantizar los derechos sexuales y derechos reproductivos a las mujeres, niñas, en toda su diversidad, es un pilar básico también en la lucha contra la pobreza. Y es por eso por lo que en la región las organizaciones de la sociedad civil seguimos trabajando para mitigar los impactos de la pobreza en las niñas y las mujeres, específicamente en todo aquello relacionado a su acceso pleno a servicios e información sobre sexualidad y reproducción. Todavía, es importante llamar atención para la responsabilidad de Estados, porque, lamentablemente, los datos indican que los gobiernos de nuestra región, en general, necesitan hacer mucho más para garantizar que las niñas, las mujeres y las personas trans se encuentren en igualdad de oportunidades económicas y, hasta que esto suceda, que tengan acceso a programas de seguridad social que les ayuden a sobrevivir.
Este ha sido un esfuerzo constante por parte de todas las organizaciones miembros y colaboradoras de IPPF, presentes en más de 27 países en América Latina y el Caribe. Ellas trabajan directamente en sus comunidades suministrando de servicios médicos y de salud como acceso a la anticoncepción, tratamiento de ITS y otros servicios asociados a la salud sexual y reproductiva con enfoque de género, centrados en la persona. Y el desafío sigue siendo muy grande: en la región una de cada cuatro niñas se casa antes de los 18 años y la mayoría queda embarazada antes de los 20 años. Esto impacta negativamente su futuro, ya que la mayoría abandona sus estudios y pasan el doble de tiempo dedicadas al trabajo no remunerado como las tareas domésticas y de cuidado.
Asimismo, las necesidades son las más básicas, como por ejemplo es la falta de acceso a toallas sanitarias, tampones o copas menstruales, que agrava la situación de mujeres y niñas que no cuentan con los recursos económicos para acceder a ellos, poniendo en peligro su salud al utilizar insumos antihigiénicos. Segundo la Fundación Friedrich Ebert, apenas 9 de 31 países de la región consideran artículos de higiene menstrual como productos de primera necesidad y un 30% de niñas en América Latina y el Caribe se ausentan de la escuela cuando están menstruando, limitando sus oportunidades de aprendizaje y desarrollo lo cual perpetua el ciclo de la desigualdad de género. Como recuerda, Chanelle Beatrice, co-executive director de Feminitt Caribbean “Poner fin a la pobreza es también apoyar a las personas independientemente de su género y sexualidad, garantizar que puedan existir sin barreras y que tengan la dignidad que merecen. Debe existir equidad menstrual para sostener la erradicación de la pobreza."
Finalmente, también entre las poblaciones más olvidadas por las políticas públicas, hoy también necesitamos recordar que, para la comunidad trans, el impacto de la pobreza y el poco acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva es aún más fuerte frente a la discriminación ejercida hacia ellas. La propria Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) llama la atención de que las personas trans “enfrentan pobreza, exclusión social y altas tasas de inaccesibilidad a la vivienda, presionándolas a trabajar en economías informales altamente criminalizadas, como el trabajo sexual o el sexo por supervivencia”. O sea, con tantos datos y evidencia ante nosotros y con tantas posibilidades de avanzar, hoy es, sobre todo, un día para recordar a todos los países latinoamericanos la necesidad de cuidar mejor a su gente y acelerar acciones que nos lleven a reducir los alarmantes niveles de desigualdad y pobreza en nuestra región.
when
region
Americas & the Caribbean
Subject
Sexual Health